ciclismo
miércoles, 21 de noviembre de 2012
lunes, 19 de noviembre de 2012
viernes, 16 de noviembre de 2012
luis ocaña
LUIS OCAÑA. 1969
Hace ya tiempo que no siento las mismas emociones al contemplar el Tour de Francia. En mi opinión, los momentos más bellos , puros, dramáticos e intensos, los hemos vivido en blanco y negro, en la época de los años grises, de los tiempos revueltos. Para mí, sólo ha habido dos grandes ciclistas que me han conmovido grandemente : Luis Ocaña, el indómito que se atrevió a desafiar al Rey de Reyes, al insaciable, al canibal Eddy Merckx. El otro es el francés Raymond Poulidor, el Rey sin corona, el eterno segundón.En vísperas de las etapas pirenaicas, después de que el belga robara otro puñado de segundos en una contrarreloj corta, el español contaba con 7’23” de ventaja, una diferencia holgada, pero en la etapa Revel-Luchon le esperaban un Merckx desbocado y una tormenta de granizo. En el Portet d’Aspet, primera ascensión del día, cuajó la escapada en la que Fuente se coló para ganar la etapa. Por detrás, el grupo marchaba a tren, con Ocaña soldado a la rueda de Merckx. No quería dejarle ni un metro de ventaja. Después subieron el col de Mente bajo un bochorno asfixiante, envueltos en electricidad estática y amenazados por unos nubarrones de color petróleo que se iban acumulando sobre la cordillera. Allí comenzó Merckx sus demarrajes, cada uno más brutal que el anterior, pero Ocaña respondía bien, siempre pegado a rueda, y los demás rivales cedían terreno.
Poco antes de cruzar la cima del puerto, estalló un trueno, el cielo se rasgó y una oleada de granizo cayó sobre los ciclistas. Se hizo de noche. Merckx aprovechó el diluvio y la oscuridad para tensar la cuerda y atacó en las primeras curvas del descenso: pensaba que Ocaña, con un colchón de siete minutos, tomaría precauciones y quizá cedería terreno en la bajada. Pero la carretera desapareció bajo una riada furiosa de agua, hielo y barro, y en una curva de herradura a la izquierda Merckx no pudo controlar la bici, siguió recto y chocó contra la ladera. Por detrás llegó Ocaña, con su bici ultraligera de titanio diseñada para etapas de montaña, incapaz de gobernarla en un descenso así, y cayó al lado de Merckx. Al español le criticaron que arriesgara para seguir al belga bajo aquella granizada, pero él se defendía: “Yo no quería seguirle, es que no podía parar, iba sin frenos. Los ciclistas sabemos bajar con lluvia, sabemos cómo secar la llanta con frenadas cortas y seguidas, pero allí íbamos sobre un río de barro y los frenos no servían para nada”.
Poco antes de cruzar la cima del puerto, estalló un trueno, el cielo se rasgó y una oleada de granizo cayó sobre los ciclistas. Se hizo de noche. Merckx aprovechó el diluvio y la oscuridad para tensar la cuerda y atacó en las primeras curvas del descenso: pensaba que Ocaña, con un colchón de siete minutos, tomaría precauciones y quizá cedería terreno en la bajada. Pero la carretera desapareció bajo una riada furiosa de agua, hielo y barro, y en una curva de herradura a la izquierda Merckx no pudo controlar la bici, siguió recto y chocó contra la ladera. Por detrás llegó Ocaña, con su bici ultraligera de titanio diseñada para etapas de montaña, incapaz de gobernarla en un descenso así, y cayó al lado de Merckx. Al español le criticaron que arriesgara para seguir al belga bajo aquella granizada, pero él se defendía: “Yo no quería seguirle, es que no podía parar, iba sin frenos. Los ciclistas sabemos bajar con lluvia, sabemos cómo secar la llanta con frenadas cortas y seguidas, pero allí íbamos sobre un río de barro y los frenos no servían para nada”.
Luis Ocaña, el ‘Espagnol de Mont Marsant’
El mundo del ciclismo más veterano todavía recuerda al gran Luis Ocaña. Sin sede fija, siempre se movió entre España y Francia, como si de un nómada se tratase. Nació en Priego, en la provincia de Cuenca, un 9 de junio de 1945. Posteriormente, a los seis años, él, junto a toda su familia emigró al país vecino para buscar una estabilidad que no encontró en su ciudad natal. Luis era un niño enfermo, enclenque y aquejado de problemas respiratorios.El “español de Mont Marsant”
Así le conocían los franceses, puesto que era aquí donde vivía tras su peregrinación al país galo. Fue aquí donde se formó como ciclista de la mano de Antonin Magne (Campeón del Tour en 1931 y 1934). Se inició como en las carreras locales del sur de Francia. Su primer equipo profesional fue el Fagot, donde se erigió como gran figura del pelotón español. Ciclista de enormes cualidades, brillante escalador, excepcional contrarrelojista, de carácter. Susodichas virtudes le llevaron a conseguir numerosas victorias a lo largo de su trayectoria profesional (1968-1977) siendo el Tour de Francia la carrera donde más destacó consiguiendo la victoria en la general final en 1973.
Consiguió muchas carreras pero siempre menos de las que hubiera merecido y es que el elenco de sus éxitos va ligado al de sus desdichas. Su vida alternó siempre momentos exultantes con jornadas dramáticas. Caídas, accidentes, bronquitis, resfriados, fueron perfilando a un Luis Ocaña siempre ‘al límite’.
“El Merckx español”
ejercio de word I
1-¿Por qué el pan de molde es cuadrado, si el chopped, salami, mortadela...son redondos?
¿Quién tiene la culpa de esto, los tranchetes?
2-Por qué, cuando te duele una herida, siempre llega alguien que te dice:
¿Te duele? Eso es que se está curando...Que me imagino a Jesucristo con los clavos, y la Virgen : ¿Te duele? Fenomenal, en tres días vas a estar como nuevo....
3-¿Por qué en las películas de miedo siempre aparece una puerta cerrada de la que sale mucha luz por las rendijas? ¿Qué hacen los espíritus ahí detrás, fotocopias?
4-Por qué cuando yo compré el piso, a mí no me dieron la canica que tienen los demás vecinos (pero todos) y que se les cae o la echan a rodar a partir de las doce de la noche?
5-Por qué cuando llegamos a lo alto de una montaña nos ponemos las manos en la cadera?
6-Por qué abrimos la boca cada vez que miramos al techo? 7-Por qué nos da por ir a la nevera cada cuarto de hora si siempre hay lo mismo? 8-¿Por qué si nunca usamos las páginas amarillas,cuando las ves en el portal te pones contentísimo y, de hecho, piensas en cogerlas todas?
¿Quién tiene la culpa de esto, los tranchetes?
2-Por qué, cuando te duele una herida, siempre llega alguien que te dice:
¿Te duele? Eso es que se está curando...Que me imagino a Jesucristo con los clavos, y la Virgen : ¿Te duele? Fenomenal, en tres días vas a estar como nuevo....
3-¿Por qué en las películas de miedo siempre aparece una puerta cerrada de la que sale mucha luz por las rendijas? ¿Qué hacen los espíritus ahí detrás, fotocopias?
4-Por qué cuando yo compré el piso, a mí no me dieron la canica que tienen los demás vecinos (pero todos) y que se les cae o la echan a rodar a partir de las doce de la noche?
5-Por qué cuando llegamos a lo alto de una montaña nos ponemos las manos en la cadera?
6-Por qué abrimos la boca cada vez que miramos al techo? 7-Por qué nos da por ir a la nevera cada cuarto de hora si siempre hay lo mismo? 8-¿Por qué si nunca usamos las páginas amarillas,cuando las ves en el portal te pones contentísimo y, de hecho, piensas en cogerlas todas?
¿Qué esperamos encontrar? ¿Berberechos?
10-¿Por qué cuando nos cuelgan el teléfono nos quedamos mirándolo como si el teléfono tuviera la culpa?
11-¿Por qué cuando nos llaman al móvil sentimos la necesidad irrefrenable de ponernos a andar de un lado a
jueves, 15 de noviembre de 2012
imagenes de ciclismo
Nutrición en el ciclismo. El ciclismo posee unas exigencias enegéticas grandes, ya que somete al organismo a grandes esfuerzos durante varios días de competición y para ello no sólo debe de alimentarse correctamente en los días previos a la competición, sino durante toda la temporada, para mantener preparado y en buenas condiciones físicas al organismo, que va a ser sometido a esfuerzos considerables.
miércoles, 14 de noviembre de 2012
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